Parece de perogrullo, pero es realmente necesario tener una idea de qué tipo de fotografía deseo hacer, cómo irá la iluminación, dónde se ubicarán los sujetos y/u objetos, etc, es decir, debo definir de antemano el tema.
Antes cuando era novicio en esto, iba a la calle, o al evento, a tomar un montón de fotos, sin alguna idea clara de lo que deseaba realmente, hoy sé que lo más importante, para que estas imágenes gusten, es que cuenten una historia, y estén bien compuestas, más que la cantidad de ellas.
Y claro, al hacerlo de ese modo empecé a tener el inconveniente de que, como las hago en formato raw, pesan demasiado, y me llenaban la tarjeta de memoria con imágenes que tal vez nunca iba a usar. Y más encima, cuando necesita espacio, no lo tenía.
Y por otro lado, empecé a pensar que esto de apretar tantas veces el obturador, me podría traer inconvenientes con los mecanismos de la cámara, limitando la vida útil de la misma.
Entonces, qué hacer para evitar este hábito que estaba adquiriendo?
Primero, empecé a mirar y observar, muchas fotografías de otros, tanto que fueran profesionales o no, reconocidos o no, la idea era solo analizarlas, buscando puntos de interés, tipo de composición, etc, cualquier cosa que me sirviera.
Segundo, empecé a visualizar de antemano lo que quería obtener, de acuerdo al lugar y a la ocasión. Hice desde dibujos en papel a lápiz, hasta una especie de ritual en que cerraba los ojos y la veía delante de mí, tal y como la deseaba.
Bueno, todo esto ayudado por la clásica prueba y error.
Así, mejoré bastante mis fotos, aprendí que llevando la idea por anticipado necesitaba menos disparos para conseguir mejores resultados.
Y lo que es mejor, ya no me sorprendí con una buena toma cuando la revelaba, haciendo que fuera solo por buena suerte.
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